Transformando un entorno natural: Fontanas, ejemplo de gestión ambiental

Continúo dando difusión a trabajos que he realizado en otros ámbitos; en este caso recupero esta historia del paraje de Las Fontanas (en Sax) y su absoluta recuperación y transformación gracias a la tenacidad y sapiencia de la concejalía de Medio Ambiente de aquel entonces (2017), dirigida por el arboricultor y especialista en vida árborea, además de buen amigo, Javier Martínez. Sinceramente creo que es un ejemplo reluciente de lo que se puede conseguir desde la administración en materia ambiental.


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Junto a la localidad, apenas unos metros por encima del curso del rio Vinalopó y contando con magníficas panorámicas, el espacio natural de Las Fontanas ha sido objeto de actuación habitual por parte de la administración pública. No con demasiada fortuna, como recuerda el esqueleto metálico y oxidado de lo que en su día iba a ser un geriátrico en el centro del paisaje. “Aquí se han intentado cosas, en otra época hubo una iniciativa de escuelas taller, pero todo quedó sin continuidad y el espacio llevaba años prácticamente abandonado”, explica el edil de Medio Ambiente, Javier Martínez.

La iniciativa emprendida esta legislatura por la concejalía pretende, esta vez sí, llevar las cosas hasta el final y realizar una profunda restauración del paisaje. Para ello, primero se retiraron más de 50 toneladas de desperdicios y escombros en las cercanías de la estructura, se ha reformado el pequeño almacén de los jardineros, se ha restaurado por completo el invernadero y se han puesto en marcha los huertos urbanos, que ya llevan un año funcionando y que este mismo año se van a ampliar en otras diez parcelas.

Ahora, se trabaja en la recuperación de tres albercas y la creación de un pequeño lago natural, convirtiendo la zona en un espacio de recreo y esparcimiento para la ciudadanía. Estarán conectados por un pequeño canalillo y en otros tramos se recuperará una acequia. Y de gran importancia, por supuesto, la repoblación arbórea exhaustiva que ya ha comenzado y que pretende dotar al municipio en toda esta zona lindante al rio Vinalopó con 2.400 árboles nuevos árboles.

Los primeros 200 ejemplares ya se yerguen en el terreno, previamente preparado, en muchos casos, con restos de poda de otras zonas del término. “Son dos ecosistemas diferentes, uno un bosquecillo de frutales muy mediterráneos, con almendros, higueras, granados, albaricoques. Y por otra parte, en la zona de la bajada lindante con la rambla, van olmos, pues los restos que quedan son indicativos de que antiguamente toda esta parte de la rambla estaba poblada por esta especie. Y justo al comienzo del llano va un gran encinar, una pantalla de encinas que pare los vientos del oeste y el impacto de las edificaciones. Cuando estemos aquí, la visión del entorno será totalmente arbórea y natural”, enumera Martínez. “El año que viene, tercero del proyecto, introduciremos arbustos, sistemas de riegos y el proyectado lago. El proyecto final, estamos trabajando en ello y buscamos fuente de financiación, es restaurar la estructura del fallido geriátrico, que está limpia pero abandonada”.

Esta fase de repoblación se extenderá un mes y también tendrá su faceta educativa, con la participación de los escolares de la localidad, de tal forma que en el plan de crear un gran cinturón verde alrededor del casco urbano se involucre lo máximo posible la población.