SUBIDA SALARIAL: Atrasos de 2025 e incremento en nómina en 2026

A 4 de diciembre de 2025 no sabemos si el cobro retroactivo del incremento salarial del 2,5% reconocido para este año compensará la subida del IPC de o empezaremos 2026 perdiendo más poder adquisitivo. No sabemos si el incremento previsto para 2026 supondrá peder aún más poder adquisitivo o, en el mejor de los casos, que nos quedemos como estamos.

No olvidemos que finalizado el periodo de aplicación del anterior acuerdo salarial, firmado por dos de los sindicatos de la Mesa de Función Pública, perdimos un 5% de poder adquisitivo adicional, pues la previsión de incremento del IPC para 2022 (del 3,5%) se vio ampliamente superada, llegando la tasa interanual al 8,4%

¿Y cómo estamos los docentes madrileños? Con una pérdida acumulada de poder adquisitivo entre 2010 y 2024 de al menos el 17%, sin contar el recorte de las pagas extra que como todo el personal al servicio de la Administración sufrimos desde ese mismo año.

Mientras no se supere esa brecha, el Gobierno nos sigue negando el sueldo que nos corresponde, y se limita a firmar un nuevo acuerdo salarial que una vez más se ajusta a sus previsiones de incremento del IPC entre 2025 y 2028. Si al final no se ajusta, mala suerte, porque una vez más, las subidas tienen tope. En todo caso, los sindicatos firmantes renuncian a recuperar la brecha salarial que acumulamos desde hace 15 años y ni siquiera exigen, en el ámbito correspondiente y como condición previa, la recuperación del importe completo de las pagas extra.

Recuperación de pagas extra, vinculación de las subidas salariales al IPC (como se aplica a las pensiones y al salario mínimo) y calendario de recuperación del poder adquisitivo perdido, habrían sido las condiciones básicas de un acuerdo retributivo digno.

No olvidemos que ante una nuevo escenario de crisis, pueden volver a congelarnos o reducirnos los sueldos, incrementando aún más la pérdida de poder adquisitivo, con lo que la recuperación de lo que nos corresponde es urgente. Por desgracia, parece que los sindicatos con representación en la Mesa de Función Pública optan una vez más por confundir y apaciguar al personal y lavarle la cara al Gobierno, que conviene no olvidar que es nuestra patronal... una patronal que pese a su discurso "obrerista", en términos retributivos trata peor a sus empleados que la mismísima CEOE.