ASCENSO AL CERRO SAN MIGUEL

ASCENSO AL CERRO SAN MIGUEL
Esta gran caminata que quedara bien marcada en nuestras mentes y corazones, una gran aventura llena de cordialidad, compañerismo y amistad, entre parajes del Desierto de los Leones, la magia del bosque, la inmensidad de los valles, la majestuosidad de la peñas, el misticismo arqueológico y religioso, los hongos del camino y el ascenso triunfante a la cima del Cerro donde la ermita dedicada al Arcángel San Miguel pareciera haber bendecido nuestro recorrido, al retomar el regreso una estrepitosa lluvia entre la espesura del bosque y en medio de la obscuridad le dio el toque de intensidad a nuestra aventura.

El Parque Nacional Desierto de los Leones con sus mas de mil 800 hectáreas de bosque, pertenece a la unidad geomorfológica de la Sierra de las Cruces, parte del sistema montañoso del eje Neo volcánico Transversal.
La zona es de gran belleza natural y valor ambiental, es un importante proveedor eco sistémico, pues tiene un gran bosque, con muchos parajes, secretos prehispánicos escondidos, manantiales, un lago, una presa que se alimenta de los escurrimientos del bosque los cuales abastecen a gran parte de la alcaldía de Cuajimalpa, Álvaro Obregón (parte de la cuenca de la Ciudad de México) y el municipio de Huixquilucan en el Estado de México, es en si, un gigantesco pulmón generador de oxígeno, un concentrador de agua y un gran reservorio de flora y fauna.

Es indudablemente un lugar idóneo para la practica del senderismo, ciclismo de montaña, campismo y otras actividades de carácter deportivo, cultural y medio ambiental.

Y es justamente ahí en los más alto del cerro donde se encuentra la Ermita de San Miguel Arcángel, en la cúspide del estrato volcánico donde antiguamente existió un importantísimo adoratorio prehispánico.

Enclavado en la Sierra de las Cruces hacia la parte alta del Santo Desierto de los Leones, la orden de los carmelitas descalzos se encargaron no solo de la construcción de la Ermita, si no también de un convento, un muro y varios elementos arquitectónico-religiosos.

Visitar este adoratorio que ocupa un lugar espectacular y de gran significado cósmico religioso es una experiencia valga la redundancia; religiosa.

Es imponente este cerro, tiene 3750 msnm desde donde se contemplan las altas cumbres volcánicas del Nevado de Toluca, del Ajusco, del Popocatépetl, del Iztaccíhuatl, la Sierra de Guadalupe, la Sierra de Santa Catarina, la inmensa Cuenca de México, el valle de Texcoco, el Monte Tláloc y el Telapon. Desde ese punto se observan los maravillosos bosques en todas las laderas de la sierra. Esta protuberancia geológica, de relevante espacio geográfico en la cima de la sierra es el parte-aguas entre la Cuenca del Valle de México y el Valle de Toluca. Y de la sierra de las Cruces y el Desierto de los Leones surgen escurrimientos que da nacimiento al río Magdalena, un rio que llamo la atención del hombre desde tiempos inmemoriales, al observar cómo desde las cumbres de la sierra, como un vientre, brotaba el agua, esa sustancia proveedora de vida.

Contexto arquitectónico e histórico:
El Ex Convento tiene una abadía construida por la orden de los Carmelitas Descalzos, su composición consta de un claustro, celdas, refectorio, biblioteca, cocina, hospedería, lavandería, huerta con capillas, barda perimetral, caballerizas y el Museo Bicentenario.

Durante el proceso de la independencia de México, la orden abandono el Convento para cederlo al entonces gobierno de la capital virreinal. A la postre, el recinto fue abandonado y sirvió como fábrica de dinero falso.

Posterior a las Leyes de Reforma, se reconoció el valor histórico de la zona y se declaró Reserva Forestal en 1876, Venustiano Carranza lo promulgó Parque Nacional en 1917.