LA BATUTA FEMINISTA OLVIDADA | Por Zuleika Esnal

NO ES DE AHORA
Antonia Brico, la directora de filarmónicas

La primera mujer en dirigir las filarmónicas de Berlín y Nueva York. La que desafió la música que dominaban los varones y formó una orquesta de mujeres. Nació en Roterdam el 26 de junio de 1902 y a los cinco años se muda con su familia a Los Ángeles. Como tenía la costumbre de comerse las uñas, el médico le recomendó a su madre que la mandara a clases de piano para que dejara de hacerlo. Le encantaba ir a escuchar al pianista Paul Steindorf a quien le dijo que ella también quería ser directora de orquesta. “Eso jamás va a ser posible, sos mujer” fue la respuesta.

Pasada la adolescencia se muda de ciudad, rompe lazos con su familia por haberle ocultado que era adoptada durante tantos años. Empieza a trabajar como asistenta del director de la Opera de San Francisco. En Alemania fue la primera mujer en graduarse en la Escuela Estatal de Música de Berlín. En 1930, con todo en contra, debuta en primera como directora de la filarmónica de Berlín. Dirigió también la Filarmónica de Hamburgo, San Francisco y Los ángeles pero como tenía vagina le negaban un puesto permanente. Se limitaban a ponerla como invitada para poder echarla cuando quisieran
Hizo una gira histórica por Europa con un éxito descomunal y TODOS LOS MÚSICOS VARONES declararon que no iban a tocar con ella porque “Consideramos ridículo e inconcebible que nos dirija una mujer” ¿Qué hizo ella? Creó una orquesta de mujeres: La sinfónica de mujeres de Nueva York.

EL proyecto tuvo muchas trabas pero la primera dama Eleonor Roosevelt le hizo tal quilombo al marido que la tuvo que dejar en paz. Dio clases de piano hasta el final de su vida. Le permitían como mucho cinco presentaciones al año y ella declaró “Tengo talento y fuerza para hacer cinco por mes, le están tirando un pedazo de pan a alguien que muere de hambre”.
La vida de Antonia cambió apenas y sobre el final cuando se estrena el documental hecho por otra mujer “Antonia retrato de una mujer” de Judy Collins. Los únicos dos conciertos con difusión mediática fueron meses antes de morir. Gracias a otras mujeres, no lograron enterrarla.

Por @zuleikitas

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