Obra comentada: La Adoración de los Reyes Magos, de Fray Juan Bautista Maíno

Jaime García-Máiquez, investigador del Gabinete Técnico del Museo, comenta la obra "La Adoración de los Reyes Magos" de Fray Juan Bautista Maíno.

Escena del Nuevo Testamento (Mateo 2, 2-12) que narra la Adoración de los Reyes Magos al Niño Jesús en presencia de la Virgen María, San José y dos criados, iluminados por la luz de la estrella que les guió hasta Belén. Ubicado en el cuerpo bajo de la calle derecha del retablo, Maíno acentúa la calidad táctil tanto de las telas como de los materiales de las copas metálicas, la naveta de nácar del rey negro o de las plantas. Además de la recuperación de la verosimilitud, destaca la expresión de los contenidos anímicos de los protagonistas del hecho religioso, representados en los rostros y la rica gestualización de las manos.

Tras su viaje a Italia y quizás por el norte de Europa, Maíno recibe el encargo de pintar para los monjes dominicos de Toledo el retablo mayor de San Pedro Mártir, con el tema de las Cuatro Pascuas: Navidad, Epifanía, Resurrección y Pentecostés. Antes de concluir el encargo el pintor ingresa en la Orden. Está firmado en el sillar del asiento de la Virgen.

THE ADORATION OF THE MAGI, BY FRAY JUAN BAUTISTA MAÍNO (1611-1613)

Jaime García Maiquez, Prado’s Technical Documentation Department, comments the work The Adoration of the Magi by Fray Juan Bautista Maíno.

This scene from the New Testament (Matthew 2, 2-12) tells of the Adoration of the Magi, who appear with the Christ Child in the presence of the Virgin Mary, Saint Joseph and two servants, illuminated by the light of the star that guided them to Bethlehem. It was located at the bottom of the right wing of the altarpiece. Maíno accentuates the tactile quality of the textiles and the metal goblets, the Black King's mother-of-pearl censer and the plants. The outstanding realism of this scene is accompanied by the emotive expressions reflected in the faces and ample gestures of the protagonists of this religious event.

After traveling through Italy, and perhaps through northern Europe, Maíno was commissioned by the Dominican Monks to paint the main altarpiece at the Convent of San Pedro Mártir in Toledo. The chosen subject was the Four Pascal Feasts: Christmas, Epiphany, Resurrection and Pentecost. Before finishing this commission, the painter entered the Dominican Order. This work is signed on the back of the Virgin's seat.