Entrevista a Oscar Flores Tapia

Entrevista a Oscar Fores Tapia
Exgobernador de Coahuila
19 de Julio de 1987
Programa Entorno
Entrevista Luis E. Galindo.

Flores Tapia se presenta como un hombre "surgido del seno del pueblo", nacido en una zona humilde de Saltillo.
Destaca su profundo conocimiento de la gente de Coahuila y su conexión con las clases populares.
Su participación política se remonta a los 17 años, afiliándose al Partido Nacional Revolucionario (PNR), precursor del PRI.
Describe su ascenso a través de diversos cargos dentro del partido: senaduría, Jefatura nacional de la CNOP (Confederación Nacional de Organizaciones Populares), y finalmente la gubernatura de Coahuila.
Enfatiza que su llegada a la gubernatura fue solicitada por sus compañeros y por el entonces presidente.
Afirma que su motivación para ser gobernador fue servir a su gente y a su estado, particularmente a aquellos con los que creció.

Gestión como Gobernador de Coahuila:
Describe el estado de la administración estatal al asumir el cargo como "quebrado económicamente", con una deuda significativa y bajos ingresos.
Contra las predicciones de fracaso, afirma haber transformado Coahuila, no solo en obras públicas ("no solamente en obras públicas no solamente en carreteras no solamente en construcción de escuelas sino algo más poderoso"), sino también en el rescate de la confianza de los coahuilenses en su revolución.
Se enorgullece de haber llevado a cabo una gestión activa desde la campaña, resolviendo problemas como la falta de escuelas o abasto incluso antes de asumir el cargo formalmente.
Destaca proyectos significativos realizados sin consulta previa, como la transformación de las instalaciones ferroviarias abandonadas en lo que ahora es el Boulevard Coss, la construcción del teatro de la ciudad, la presidencia municipal, edificios del partido, congreso y palacio de justicia. Relata un incidente en el que tuvo que confrontar a policías federales enviados desde México para detener estas obras.
Menciona la implementación de proyectos para el uso de las aguas del Río Bravo para irrigación, basándose en un convenio con Estados Unidos que, según él, no era conocido por el propio presidente en ese momento.
Considera que, a pesar de no haber terminado su sexenio, la obra que realizó superó las metas iniciales y pagó la deuda del estado.
Relación con el PRI y el Sistema Político Mexicano:
Se identifica como un militante activo desde el PNR, pasando por el Partido de la Revolución Mexicana (PRM) y el PRI.
Ha ocupado cargos importantes dentro de la estructura del partido a nivel estatal y nacional (Presidente del Comité Ejecutivo Estatal, parte del Secretariado Nacional, Jefe de la CNOP).
Afirma que morirá "político priista como moriré creyente y masón también", enfatizando una lealtad inquebrantable al partido.
Explica su ausencia en el nombramiento de Eliseo Mendoza Berrueto como candidato, basándose en su principio de no asistir a donde no es invitado y no aceptar comisiones que no le son dadas, aunque considera a Mendoza Berrueto y a Jorge de la Vega (presente en el evento) como amigos.
Sobre la "corriente democratizadora" dentro del PRI (mencionando a Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo), expresa extrañeza ante su "inquietud tan tremenda", aunque reconoce haber tenido posturas que podrían interpretarse como intentos de democratización.
Considera que el partido "falló alguna vez cuando quiso hacer democrática la selección de sus elementos", argumentando que un partido surgido de una revolución popular no debe sombrerear a grupos de poder o aquellos formados en el extranjero.
Muestra escepticismo hacia las posibilidades de los partidos de oposición, afirmando que no cree que puedan obtener siquiera los representantes necesarios en las casillas electorales, al menos en Coahuila.

Considera que México continúa en la búsqueda de la justicia social, la cual aún no llega a quienes más la necesitan.
Ve a los "enemigos de la revolución" (aquellos que buscan acaparar la riqueza, los que lucharon contra Hidalgo, Juárez, Huerta, etc.) como un "riel paralelo" que nunca se juntará con la corriente política revolucionaria.


Regresó al pueblo y continúa participando en la vida cotidiana de la ciudad, visitando mercados.
Dirige un mensaje a los mexicanos y coahuilenses para que no se dejen "apantallar por esas campañas ofensivas contra la revolución contra el régimen y contra el futuro de nuestro país".
Recuerda la capacidad histórica de México para superar desafíos (independencia, reforma, revolución) y afirma que "nadie nos va a detener".
Reitera su disposición a intervenir si los principios de la Revolución Mexicana están en riesgo.