Las Bendiciones y Maldiciones de Deuteronomio 28: ¿La Obediencia Trae Prosperidad?
Автор: Hechos de las Escrituras
Загружено: 2024-11-29
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"¿Prosperidad o Ruina? ¡El Poder Transformador de Deuteronomio 28!"
Dios, por medio de Moisés, dejó claro que la obediencia traería abundancia. Moisés proclamó que, si Israel escuchaba atentamente la voz del Señor, las bendiciones los alcanzarían: “Bendito serás en la ciudad, y bendito serás en el campo” (Deuteronomio 28:3). Serían prósperos en sus negocios, sus cosechas serían abundantes, y el vientre de las mujeres y de los rebaños sería fértil. Además, el Señor prometió protección contra enemigos, victoria en las batallas y el reconocimiento como una nación santa entre todas las demás (Deuteronomio 28:7-10).
Por otro lado, el peso de las maldiciones era aterrador. Moisés advirtió que, si Israel abandonaba los mandamientos de Dios, experimentarían lo opuesto a las bendiciones. “Maldito serás en la ciudad, y maldito serás en el campo” (Deuteronomio 28:16). La tierra se volvería estéril, los enemigos prevalecerían, y enfermedades y plagas devastarían al pueblo. La desobediencia resultaría incluso en la pérdida de la tierra prometida y el exilio en tierras extranjeras, como se describe en Deuteronomio 28:64: “El Señor los dispersará entre todos los pueblos, de un extremo de la tierra hasta el otro.”
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