Cinema Horror

Una pieza original de 30 minutos de música cinematográfica inspirada en el género de terror, diseñada para crear ambiente sin sobresaltos. Con un enfoque en la atmósfera más que en el miedo, esta composición combina elementos clásicos del cine de suspense —cuerdas susurrantes, pianos melancólicos, texturas ambientales y sutiles percusiones— para evocar misterio, nostalgia y una ligera inquietud.

Ideal tanto para ambientar una noche de Halloween como para acompañar momentos de concentración, lectura o relajación con un toque oscuro pero elegante. Su estructura fluida y sin picos agresivos la hace perfecta para usar en el fondo: en fiestas temáticas, exhibiciones, podcasts, sesiones de escritura o incluso como banda sonora para tus pensamientos más introspectivos.

Grabada con instrumentos acústicos y capas electrónicas cuidadosamente equilibradas, esta obra rinde homenaje al cine de terror clásico y moderno, pero con un enfoque contemplativo y cinematográfico, nunca perturbador.

30 minutos de atmósfera envolvente.
Sin gritos. Sin sustos. Solo mood.
------------------------------------------------------------------------
An original 30-minute piece of cinematic music inspired by the horror genre, crafted to set a mood—never to startle. Focusing on atmosphere over fear, this composition blends classic suspense-film elements—whispering strings, melancholic piano, ambient textures, and subtle percussion—to evoke mystery, nostalgia, and a gentle sense of unease.

Perfect for setting the tone on Halloween night or for accompanying moments of focus, reading, or relaxation with a dark yet elegant touch. Its smooth, flowing structure and absence of jarring moments make it ideal as background ambiance—for themed parties, art exhibitions, podcasts, writing sessions, or even as a soundtrack to your most introspective thoughts.

Recorded with acoustic instruments and carefully balanced electronic layers, this work pays homage to both classic and contemporary horror cinema, all through a contemplative, cinematic lens—never unsettling, always immersive.

30 minutes of enveloping atmosphere.
No screams. No jump scares. Just mood.