⛪ Iglesia Luz del Mundo 🌎 Propuesta de Protección Contra Rayos 🌩

"Protección Integral de la Iglesia Luz del Mundo: Salvaguardando un Tesoro Cultural"

En la majestuosa ciudad de Tapachula, en el estado de Chiapas, se erige la sede de la Iglesia Luz del Mundo, un imponente templo cuya arquitectura evoca la grandeza de una mezquita. Con dos torres de más de 30 metros de altura y capacidad para albergar a más de 3,000 personas, este monumento arquitectónico no solo es el orgullo de sus miembros, sino de toda la ciudad y el estado.

Sin embargo, esta región de Chiapas es conocida por su alta frecuencia de tormentas eléctricas, registrando de 3 a más de 6 impactos de rayos por metro cuadrado al año. Conscientes de la importancia de preservar la seguridad de quienes visitan este valioso patrimonio histórico, nos embarcamos en una propuesta de protección integral contra rayos para la sede de la Iglesia Luz del Mundo.

Nuestro enfoque comenzó con un exhaustivo análisis de riesgo basado en la norma mexicana NMX-J-549, la cual se sustenta en la IEC 62305. De acuerdo con esta norma, la necesidad de proteger una estructura contra rayos depende de comparar la frecuencia anual de impactos directos esperados (N0) con la frecuencia anual permitida según el tipo de estructura analizada (ND).

Tras calcular la frecuencia anual de impactos directos sobre el templo mediante una ecuación precisa, obtuvimos resultados que indicaban la necesidad de implementar un sistema de protección. La frecuencia de rayos directos esperada en la iglesia superaba la permitida para este tipo de estructuras, lo que dejaba claro que era imprescindible emplear pararrayos en este edificio.

Dado el carácter emblemático de la iglesia, su capacidad para reunir a numerosas personas y su prominente altura en la zona, se decidió emplear un nivel I de protección. Utilizando el método de la esfera rodante, desarrollamos una propuesta que demostró la necesidad de ubicar puntas captadoras en las torres y evaluar la conveniencia de colocar elementos captadores adicionales en otras áreas de la azotea.

Enfrentamos diversos desafíos técnicos durante este proceso. Uno de ellos fue asegurar la unión equipotencial de las láminas de cobre que cubren las cúpulas sin afectar su integridad. Además, debimos fijar las puntas captadoras de manera que no causaran daños a estos elementos arquitectónicos y trazar recorridos seguros para los bajantes, evitando zonas de alto tránsito de personas, hasta su conexión con el sistema de puesta a tierra.

Tras superar estos obstáculos, se aceptó la ingeniería del sistema de protección con puntas de aluminio fijadas en las torres y la cúpula. Esta última se unió equipotencialmente en 6 puntos mediante un anillo perimetral de aluminio, fijado al techo sin necesidad de perforar el material impermeabilizante, lo cual facilita el mantenimiento de las azoteas y preserva su integridad.

Asimismo, extendimos una malla sobre la cubierta del templo, la cual se conectó con los bajantes ubicados en cada una de las torres. Para garantizar una protección efectiva, se establecieron dos salidas desde la malla hacia el sistema de puesta a tierra. Este sistema está compuesto por dos mallas de arreglo lineal, cada una con 3 electrodos separados al doble de su profundidad, y cuenta con registros para realizar mediciones y asegurar su correcto funcionamiento.

El diseño del sistema de puesta a tierra se realizó utilizando acero galvanizado para garantizar su durabilidad, y se emplearon tramos de solera inoxidable en los puntos de conexión entre el terreno y los bajantes para evitar la corrosión en estos puntos críticos.

Con estas soluciones implementadas, logramos asegurar una protección efectiva contra los impactos de rayos en la iglesia, preservando la seguridad de las personas que la visitan y manteniendo la integridad de su valioso patrimonio arquitectónico.

En resumen, mediante un análisis de riesgo detallado y la aplicación de normas y estándares de protección contra rayos, desarrollamos una propuesta sólida y eficiente que garantiza la seguridad y salvaguardia de la Iglesia Luz del Mundo en Tapachula, Chiapas, ante la alta frecuencia y potencialidad de impactos de rayos en la región.

La implementación de un sistema de protección contra rayos en edificios de valor histórico es de vital importancia para preservar la seguridad de las personas que los visitan y la integridad de su patrimonio arquitectónico. Mediante un análisis de riesgo adecuado y la aplicación de tecnologías y estándares de protección, es posible garantizar la salvaguardia de estos invaluables tesoros culturales frente a los riesgos asociados a los impactos de rayos.

En nuestro compromiso por proteger el legado histórico y la seguridad de aquellos que disfrutan de estos monumentos, hemos demostrado una vez más que la implementación de medidas de protección integral es esencial para salvaguardar el patrimonio arquitectónico de la humanidad.