Haití se derrumba y nadie le para, SM, marzo 6, 2024

El gobierno dominicano fue sabio al no permitir el ingreso del premier haitiano Ariel Henry a su territorio. Es un lastre muy pesado.
El aeropuerto Toussaint Louverture está cerrado y el primer ministro solo puede entrar en su país en un helicóptero. No hay ninguna razón válida para que el gobierno dominicano se meta en esa aventura.
Si el interés norteamericano es que Henry permanezca en el poder pudieron llevarlo a su país desde la base de Guantánamo o desde Puerto Rico donde pernocta desde anoche.
A Ariel Henry lo soltaron en banda.

Tomo prestado dos párrafos de la colega Jaqueline Charles para describir lo que pasa en Haití porque no creo que se pueda hacer mejor.
“Los bancos y las oficinas gubernamentales en Haití están siendo saqueados e incendiados. Las subestaciones de policía están cayendo bajo el control de las pandillas. Las prisiones se han abierto. Y los barrios de la capital del país, Puerto Príncipe, sufren continuos disparos. Mientras una poderosa coalición de bandas armadas continúa su asalto en un Haití volátil (y el partido político de un ex líder golpista propone liderar la toma del país), aumentan los temores de que a Haití le queden apenas unos días, o tal vez incluso horas, antes de que se acabe por completo. Se derrumba”.

Haití ha vivido de crisis en crisis pero la ultima, tras el asesinato del presidente Moise parece algo así como el palo de la gata.

El país ha caído bajo el control parcial de bandas armadas que ahora han constituido una especie de Coalición dirigida por Barbecue.

Anoche el partido de Guy Phillipe proponía una junta de transición en la ausencia del premier Henry que está varado en Puerto Rico.

Estados Unidos que el mes pasado decía que respalda a Henry hasta la celebración de elecciones ayer le dio la espalda y un portavoz aclaró que no había respaldo oficial ni militar para garantizar el reingreso del mandatario a su país.

Si el aeropuerto está cerrado y sin protección militar las posibilidades de Henry de regresar a Haití son remotas y como dice la colega Charles solo falta el derrumbe.