2ª parte de ¿por qué me pasa? Desde el prisma del feng shui.

Segunda parte de ¿por qué me pasa?
¿Te ha pasado? Un día cualquiera: el despertador no sonó, te torciste el tobillo al salir de la cama, derramaste el café encima de la camisa limpia, llegaste tarde al trabajo y además se te olvidó el movil. Y cuando crees que ya no puede empeorar, descubres que tu tarjeta fue clonada. Entonces te preguntas: "¿Por qué a mí? ¿Qué hice para que el universo se ensañe conmigo?"
Hoy te voy a contar algo que nadie te dijo: no es el universo, es tu casa. Sí, leíste bien. Ese desorden que tienes en la entrada, la cama mal posicionada, las plantas muertas en el balcón… no son solo detalles decorativos. Son las causas escritas en tu espacio. Bienvenido al feng shui que transforma vidas.
El feng shui no es poner un bambú de la suerte y esperar que llueva dinero del cielo. Eso es marketing. El verdadero feng shui es una ciencia de 4,000 años que estudia cómo el espacio que habitas programa tu vida. Tu casa es como un gran móvil. Si tienes 50 aplicaciones abiertas de fondo, el teléfono se sobrecalienta, se vuelve lento y al final se traba. Tu espacio funciona igual: cada objeto desordenado, cada mueble mal colocado, cada rincón abandonado, es una "aplicación" consumiendo tu energía. Y aquí viene la revelación: tu vida cotidiana no es una serie de accidentes, es un eco de tu espacio. Esa puerta que no abres porque está bloqueada con cajas, es la misma puerta que bloquea la oportunidad de trabajo que esperas. Ese espejo que tienes frente a tu cama, es el mismo espejo que refleja insomnio y discusiones con tu pareja. No estamos hablando de magia. Estamos hablando de causalidad energética.
Déjame mostrarte lo que tu casa está diciendo de ti, y por qué te pasa lo que te pasa:
La entrada es tu primera impresión al mundo. Si abres la puerta y te encuentras con pilas de zapatos, llaves tiradas, una bombilla fundida y una puerta que chilla… no estás recibiendo energía, estás rechazándola. La entrada es la boca del chi (energía vital). Si está bloqueada, sucia o caótica, es obvio por qué las oportunidades "llegan a la puerta" pero no entran. Solución: limpia, ordena, pon una alfombrita nueva y una luz cálida. En 72 horas verás cambios.
La cocina es tu salud y tu dinero. ¿Tienes ollas con el fondo quemado? ¿La estufa solo funciona dos hornillas? ¿Nunca hay comida en la alacena? La cocina representa tu capacidad de nutrición física y económica. Si está descuidada, tu salud se resiente y el dinero "se quema". Una clienta me dijo: "No entiendo por qué siempre me falta dinero a mitad de mes". Llegué a su casa: la cocina tenía 3 de 4 hornillas rotas. Le arreglé la estufa y además, le dije que guardara un tarro de arroz lleno en la esquina de la "riqueza" (esquina izquierda lejana de la casa). Al mes siguiente, le dieron un aumento inesperado.

Ahora mismo estás pensando: "Esto suena muy místico". Déjame desmisterificarlo. El feng shui es psicología ambiental con 4,000 años de antigüedad. Tu cerebro procesa 11 millones de bits de información por segundo, pero solo 50 son conscientes. El resto es registro subliminal. Cuando tu entrada está desordenada, tu cerebro registra "caos, peligro, no entras" y activa tu sistema de estrés. Cuando tu cocina está sucia, tu cerebro registra "enfermedad, escasez". Cuando tu baño está deteriorado, registra "pérdida, desgaste". No son signos del universo: son señales que tú mismo estás enviando a tu sistema nervioso cada minuto que pasas en ese espacio. El feng shui te da claridad porque te hace ver lo que estabas viendo pero no observando. Es como cuando limpias los lentes y de repente ves el paisaje nítido.
No necesitas demoler tu casa ni gastar millones. Necesitas 3 acciones de 15 minutos cada una: Primero, nada más terminar de leer esto, ve a tu entrada. Recoge 5 cosas, limpia el piso y pon una luz que funcione. Mañana, cuenta cuántas "coincidencias" positivas tuviste. Segundo, mañana, antes de dormir, baja la tapa del inodoro, cierra la puerta del baño y pon una plantita (aunque sea pequeña) en esa habitación. En 3 días tu sueño será más profundo. Tercero, este fin de semana, reorganiza tu cama. Sácala de debajo de la ventana, sepárala de la pared con tuberías y quita espejos que te reflejen durmiendo. Duérmete con la puerta cerrada. La semana que viene tomarás decisiones con más calma.
El feng shui no cambia tu suerte. Te devuelve el control. Porque cuando tu espacio habla con claridad, tu vida deja de ser un misterio y se convierte en un diseño que tú mismo puedes rediseñar. Deja de preguntarte "¿por qué me pasa esto?" y empieza a preguntarte "¿qué está diciendo mi casa?". La respuesta ya la tienes. Solo necesitas verla. Tu vida no es un accidente. Es una creación. Y tu casa es el lienzo. #parati #fengshui #energia #metafisicachina #abundancia #fengshuitips