Maduro, armas y su miedo: el desfile del 5 de julio sin fuerza ni honor

En este nuevo episodio de Puntadas de la Pacheco, Ibéyise Pacheco analiza el espectáculo militar más reciente del régimen: el desfile del 5 de julio, una cita que históricamente simboliza la independencia de Venezuela, pero que hoy se ha convertido en un ritual vacío, sin fuerza, sin honor y lleno de contradicciones.

Mientras Nicolás Maduro anunciaba con grandilocuencia la intención de comprar armamento de guerra a Irán y Rusia, el desfile mostraba otra realidad: una fuerza armada desmoralizada, mal equipada, con uniformes reciclados y sin verdadero espíritu militar. En lugar de impresionar, fue un acto de pena ajena, un montaje propagandístico que deja al descubierto el estado real de la institución castrense.

Maduro habla de armas, pero su miedo es más grande. Se blinda, se rodea de custodios, de ascensos arbitrarios, de lealtades compradas con poder y miedo, pero no con respeto. Los nuevos altos mandos no necesariamente son los más capacitados, sino los más obedientes. La meritocracia militar ha muerto y lo que queda es una estructura al servicio de un dictador que prefiere aparentar fuerza que enfrentar la verdad de su debilidad.

En medio de ese escenario decadente, una voz resonó con fuerza y dignidad: la de María Corina Machado. En su discurso por el 5 de julio, habló con claridad, aplomo y esperanza. Llamó directamente a las Fuerzas Armadas a resistir, a desobedecer órdenes injustas y a ponerse del lado del pueblo. No hubo estridencia en sus palabras, sino firmeza. Fue, sin duda, el discurso que muchos esperaban oír en una fecha patria que ya no representa al Estado, sino a una resistencia civil que crece día a día.

Ibéyise denuncia el delirio de grandeza de Maduro, su obsesión por jugar a la guerra mientras el país se hunde en la pobreza, la migración forzada y la pérdida de instituciones. El régimen quiere proyectar poder, pero solo expone su vulnerabilidad. No es un régimen fuerte: es un régimen acorralado, que necesita blindarse porque teme perder el control.

Este episodio deja claro que la narrativa del miedo se está desgastando, y que detrás del humo de las armas y los ascensos forzados, hay un dictador que se sostiene por el miedo, no por el respeto. Y como bien advierte Ibéyise, cuando el miedo cambia de bando, las dictaduras comienzan a tambalearse.

Escucha el episodio completo y acompáñanos a desenmascarar el teatro militar de Maduro, porque informar también es una forma de resistir.