Algarín manchego. Aguardo de Chispa. 26-II-2025.

En mi afán por enseñar lo que sé, he publicado esta grabación que no es bonita ni mucho menos, pero que puede ser instructiva. Los que me conocen saben que soy un adicto a los pájaros algarines y, preferiblemente, capturados con dos celos. Es decir, que ya hayan padreado. Este manchego me lo regalaron allá por el mes de octubre y es algo revoltoso, por no decir que bastante arisco. Desde que lo enjaulé a principios de diciembre nunca lo he llegado a ver dormitar abotijado por lo que no me he atrevido a sacarlo antes. Y como se aprecia en su primer puesto su estado de celo es mas bien escaso. Cuando lo destapé en el tanto, volaba dentro de la jaula, pero cuando me perdí en el aguardo se tranquilizó. A los ocho o diez minutos, para mi sorpresa, salió con un coleteo suave y casi imperceptible, y al poco tiempo se callaba. Tuvo unas cuantas salidas de esta guisa y estando callado después de una de ellas, de repente, se engalló y se embotó, dio dos corrivueltas en la jaula y salió por alto. Para mí señal inequívoca de que había oído campo. Su comportamiento hasta el momento denota que es un pájaro cantaor, de música deficiente y de celo muy escaso. Bregaré con él con el fin de dulcificarlo y sobre todo, tratar de que su música mejore una vez que se haya encelado. Si no lo logro siempre será bien recibido por algún desarmado. Porque este algarín lo que si que tiene es genio y sangre, además de ser cantaor.