BMW sorprende con la R 1300 R: potencia bruta, diseño audaz y alma deportiva

Si hay una moto que está rompiendo esquemas en 2025, esa es, sin duda, la nueva BMW R 1300 R. Desde Alemania llega esta naked que no solo presume de músculo con su potente motor bóxer, sino que también enamora con un diseño moderno, agresivo y lleno de carácter. ¿Vale la pena? Hoy te traigo una reseña completa, con lo bueno, lo mejorable y todo lo que necesitas saber si eres un amante de las dos ruedas.

La marca bávara ha tirado la casa por la ventana. Y es que no hablamos de una simple actualización: la R 1300 R es la naked bóxer más potente y deportiva que ha creado BMW hasta la fecha. Monta el mismo propulsor que la aclamada R 1300 GS: un motor de 145 caballos de fuerza y 149 Nm de par a 6.500 rpm. Comparado con la anterior R 1250 R, que entregaba 136 CV, esta nueva joya ha ganado fuerza en todos los frentes. Y ojo, porque viene con tecnología ShiftCam, lo que significa más par en bajas, mejor respuesta en altas y menos emisiones. Una maravilla técnica que se nota desde el primer giro de acelerador.

Pero aquí no solo se trata de potencia. El diseño es otro de sus grandes aciertos. En persona impacta. El faro Full LED octogonal le da una mirada futurista, el colín afilado apunta al cielo con actitud, y el conjunto en general se siente musculoso, especialmente por esos aletines delanteros que enmarcan el radiador y le dan presencia en carretera. Todo está pensado para transmitir deportividad sin perder el toque premium que caracteriza a BMW.

En la ergonomía también hay evolución. El asiento se ha desplazado un poco hacia atrás, las estriberas están ligeramente retrasadas y el manillar es más plano, lo que obliga al piloto a inclinarse más hacia adelante. Esto mejora la aerodinámica y te mete de lleno en una postura más agresiva, ideal para los que disfrutan de una conducción deportiva pero con cierto confort.

La pantalla TFT de 6,5” es otro de los puntos altos. Tiene conectividad completa mediante la app BMW Motorrad Connected, navegación paso a paso (Turn-To-Turn), puertos USB-C y toma de 12V. Todo se maneja desde el Multi-Controller de la marca, así que si vienes de otro modelo BMW, te sentirás como en casa.

En la parte ciclo, esta naked no decepciona. Hereda el chasis de acero y el subchasis de aluminio de la GS, acompañado por una nueva horquilla invertida de 47 mm y el evolucionado EVO Paralever II detrás. La suspensión electrónica Dynamic ESA viene de serie, pero si buscas lo último, puedes añadir el sistema DSA (Dynamic Suspension Adjustment), que ajusta electrónicamente la amortiguación, la precarga y hasta compensa la carga del piloto. Un plus: tiene función de descenso automático al parar, ideal para maniobras en ciudad.

Las llantas de 17 pulgadas de aluminio con diseño de radios huecos son más ligeras (1,4 kg menos que las anteriores), y el sistema de frenos cuenta con un doble disco delantero de 310 mm con pinzas radiales de 4 pistones, y un disco trasero de 285 mm. Todo gestionado por el ABS Pro Integral, que garantiza máxima seguridad incluso en curvas.

El escape, hecho en acero inoxidable, tiene un diseño visualmente limpio pero muy trabajado, con un silencioso de doble salida hueca que le da personalidad sin exagerar en el sonido.

Y si te preguntas por los modos de conducción, vienen tres de serie: Rain, Road y Eco, pero se pueden añadir los “Riding Modes Pro” que te desbloquean los esperados Dynamic y Dynamic Pro, así como el control de tracción MSR. La caja de cambios es manual de seis marchas, aunque está disponible el sistema ASA de cambio automatizado que permite subir y bajar marchas sin tocar el embrague. Tecnología pensada para quienes quieren comodidad sin perder sensaciones.

La R 1300 R se ofrece en cuatro versiones: Estándar, Exclusive, Performance y Option 719 Kilauea. La más llamativa es la Performance, con suspensiones más deportivas, estriberas y manetas fresadas, spoiler del motor, modos de pantalla adicionales y un acabado de pintura que impone respeto.

Entre los opcionales también puedes encontrar el radar delantero con Control de Crucero Activo y Aviso de Colisión Frontal, faros adaptativos, freno trasero bloqueable y hasta asientos calefactables, que nunca están de más.

¿Qué se puede mejorar?
Pese a lo impresionante que es, hay algunos detalles a pulir. Por ejemplo, que el ASA no venga de serie en una moto de este nivel puede decepcionar a quienes buscan una experiencia tecnológica completa desde el primer momento. Además, aunque la estética es imponente, no todos los usuarios conectarán con ese faro tan peculiar. Como siempre, va a gustos.

En resumen, la nueva BMW R 1300 R es una declaración de intenciones: potencia, tecnología y diseño en una naked que no deja indiferente. Ideal para quienes buscan una moto con ADN deportivo pero con el refinamiento de una marca premium.