Croacia: El Paraíso Secreto de Europa

Split, una joya en la costa de Croacia, nos regaló un capítulo inolvidable en nuestro recorrido por Europa. El “familión” sigue descubriendo lo mejor de cada rincón, y Split no fue la excepción. Esta ciudad, con sus callejuelas empedradas y llenas de historia, nos recibió con un calor sofocante de verano, ¡35 °C! Sí, incluso en el norte del Mediterráneo el sol aprieta fuerte, y eso no nos detuvo.

Croacia, país lleno de historias antiguas y cicatrices modernas, es un verdadero mosaico de culturas. Su pasado mezcla la influencia romana, veneciana, austrohúngara y yugoslava, lo que se percibe en cada esquina de Split, una ciudad fundada hace más de 1,700 años por el emperador romano Diocleciano. En nuestro paseo por el Palacio de Diocleciano, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sentimos cómo la historia nos envolvía, caminando donde alguna vez lo hizo un emperador. Cada piedra, cada arco y cada plaza parecían susurrarnos secretos de otros tiempos.

No solo nos perdimos en la historia, sino también en las callejuelas estrechas donde cada tienda tenía un recuerdo que nos llamaba. Entre risas y fotos, nos llevamos souvenirs únicos, pedacitos de Croacia que recordarán cada instante aquí. Nos encantó interactuar con la gente local, quienes, a pesar del calor, mostraban su amabilidad y orgullo por su país. Nos contaron leyendas y nos recomendaron lugares que solo los habitantes conocen.

Esta parada en Split reafirma lo mejor de nuestro viaje en familia: cada experiencia nos llena el corazón y cada lugar deja una huella imborrable. ¿Qué sigue en el itinerario del familión? ¡Estén atentos a las próximas aventuras!