¿Qué ocultan las palabras? LA MEMORIA DESARMA EL NEGACIONISMO

Las palabras pueden ser puentes o pueden ser cuchillos. Hay quienes las usan para construir, y quienes las afilan para que corten hasta el hueso. Durante la última dictadura en Argentina, el poder no solo se impuso con fusiles y desapariciones, sino también con un discurso. Un lenguaje que hizo del miedo una doctrina y de la diferencia, un enemigo. ¿Cuánto de ese discurso sigue vivo hoy?”

LA CONSTRUCCIÓN DEL ENEMIGO

Decían que eran subversivos. Que venían a destruir la familia, la patria, la moral. Los llamaban terroristas, los acusaban de poner bombas, de corromper a la juventud. La dictadura construyó un enemigo a la medida de su terror: cualquiera que pensara distinto, cualquiera que soñara un país más justo. Primero fueron los militantes, los estudiantes, los sindicalistas. Después, cualquiera. Porque cuando el odio se instala, no conoce límites.

LA PALABRA COMO ARMA

El poder no necesita siempre de balas. A veces, le basta con repetir una mentira hasta que suene como verdad. ‘Algo habrán hecho’. ‘Los desaparecidos son una mentira’. ‘El que calla, otorga’. Frases que resonaban en los cafés, en los taxis, en la televisión. Palabras que justificaban lo injustificable. Y así, poco a poco, el terror se disfrazó de sentido común.

DEL PASADO AL PRESENTE

Pero los discursos de odio no quedaron en el pasado. Siguen ahí, con otras caras y otros nombres, pero con el mismo veneno. Hoy se disfrazan de chiste, de libertad de expresión, de ‘decir lo que se piensa’. Se mueven rápido en redes sociales, en discursos de campaña, en comentarios al pasar. Y aunque las armas sean distintas, el objetivo es el mismo: dividir, sembrar miedo, justificar la violencia.

Hay quienes creen que las palabras se las lleva el viento. Pero no. Las palabras quedan, las palabras pesan, las palabras pueden abrir heridas o cerrarlas. A pocos días del 24 de marzo, la pregunta no es solo qué recordamos, sino cómo hablamos del pasado y del presente. Porque el ‘Nunca Más’ no es solo un grito. Es una decisión.

Memoria, Verdad y Justicia
NUNCA MÁS
24 de marzo de 2025
Instituto de Justicia y Derechos Humanos
Universidad Nacional de Lanús