🚨 “Abascal en modo FURIA: 🚨“Abascal en modo FURIA: La arenga más dura contra PP y PSOE en Salamanca”

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En su discurso en Salamanca, Santiago Abascal ofreció una intervención extensa, cargada de crítica política, apelaciones emocionales y una defensa apasionada del proyecto de VOX. Desde el inicio, dejó claro que el eje central de su mensaje sería el rechazo frontal al bipartidismo español, representado por el Partido Popular y el Partido Socialista. Según Abascal, ambos partidos han gobernado durante décadas con alternancia pactada, manteniendo un sistema que —a su juicio— ha perjudicado al país, debilitado las instituciones y traicionado la voluntad de millones de ciudadanos.

El líder de VOX comenzó destacando que la paciencia de los españoles se ha agotado. Señaló que PP y PSOE, más allá de sus diferencias discursivas, comparten políticas que calificó de “lesivas” para la economía, la unidad nacional y la soberanía del país. Abascal insistió en que ambos partidos han cedido ante intereses globalistas, han promovido un gasto público descontrolado y han permitido, según sus palabras, el avance cultural e ideológico de la izquierda incluso cuando el PP gobernaba.

En un momento especialmente enérgico, Abascal acusó al bipartidismo de haber fomentado “una mentira permanente”, donde se promete cambio, pero se aplican las mismas políticas. Criticó que el PP, pese a presentarse como oposición, termina apoyando o pactando medidas que facilitan la agenda socialista. De manera explícita, mencionó leyes, reformas y decisiones que, según él, prueban esa connivencia entre los dos grandes partidos.

El discurso también dedicó un apartado importante a la economía. Abascal argumentó que España sufre un modelo fiscal injusto y asfixiante que afecta especialmente a las familias, autónomos, agricultores y pequeños empresarios. Atribuyó esta situación a décadas de políticas realizadas por gobiernos de ambos colores. En este punto, defendió la necesidad de una “revolución fiscal” que permita liberar al trabajador y al emprendedor de cargas excesivas.

La inmigración fue otro de los temas centrales. Abascal volvió a expresar su rechazo a lo que él denomina “inmigración masiva y descontrolada”, presentándola como una amenaza para la convivencia, la seguridad y el mercado laboral. Insistió en que esta política migratoria es otro punto donde PP y PSOE han actuado igual, acusando a ambos de fomentar una llegada constante de inmigrantes ilegales que —según dijo— el Estado no puede absorber.

Abascal también apeló a la defensa de la identidad cultural, la historia y las tradiciones españolas, criticando lo que calificó como “tentativas de borrar la memoria nacional”. Señaló que solo VOX defiende sin complejos la unidad de España, la igualdad entre españoles y la protección de las fronteras.

Cerró el discurso haciendo un llamado a la movilización. Según él, el voto a VOX no solo es un acto de protesta, sino el camino hacia un verdadero cambio. Concluyó insistiendo en que España necesita “una alternativa real, no una alternancia pactada”, y que el tiempo del bipartidismo “ha terminado”. Su mensaje final fue aplaudido con fuerza: un llamado a recuperar la esperanza y a construir una España más libre, fuerte y cohesionada.