DGPM 1074 - 9: La virgen del cristal

Muy cerca de Celanova se encuentra la pequeña localidad de Vilanova dos Infantes. No podemos perdernos el paseo por sus estrechas calles en una
villa que conserva el encanto de la arquitectura medieval gallega.
La joya de la aldea es esta torre, vestigio de una fortaleza construida en el siglo XII por los padres de San Rosendo, que dio origen al pueblo. El esbelto edificio, de 19 metros, fue derribado por la revuelta Irmandiña y reconstruido de nuevo.
La Virgen del Cristal es la patrona de Vilanova dos Infantes. La simbólica reliquia es un bloque de vidrio de fundición, no tiene soldadura alguna, pero sí dos caras, y si la miran a contra luz, transparenta.

El Rey Felipe IV devuelve la imagen y se le autoriza el culto.
Comienza entonces la devoción de miles de fieles, y construyen para ella este templo. De la primera ermita, obra de los devotos, en 1659, queda la parte conocida como la capilla mayor.

Cada 15 de septiembre cientos de romeros asisten a la procesión "Do encontró". En ella se rinde solemnidad a la virgen con una danza pagana de los zapateros del lugar. Una de las más vistosas es el "trenzado", realizado con cintas de colores.

El grupo se compone de 8 danzantes. Hasta hace pocos años, era una danza exclusiva de varones oriundos de Vilanova dos Infantes. Pero la falta de hombres gustosos del baile obligó a incluir mujeres en el grupo en los años 80.

Antiguamente el traje se hacía con las enaguas de las mujeres para dar ese toque burlesco, pero con el paso del tiempo se fue cuidando más su aspecto.

El color rojo y verde de las bandas, se relaciona con la bandera portuguesa, quienes dieron origen a las danzas de la frontera. Paseo y baile hacen hambre, por ello recomendamos saciarla con un buen plato.

Una vez cocida y completamente deshuesada, se reboza en harina y huevo, y se fríe. Una vez tostado se cubre con una loncha de jamón. Se prepara un fondo, de chorizo, jamón serrano y agua de la cocción con pimentón.

El plato, conocido como pata dos poetas está dedicado a los Bardos de Celanova en honor a su aportación a la cultura gallega.
Después de un buen comer, si buscan el descanso perfecto, solo tienen que desplazarse a 5 minutos del centro del casco antiguo.
La antigua casa rectoral de Ansemil, situada junto a la iglesia y el camposanto de dicha parroquia ha sido reformada.
Esta casa de turismo rural es fruto de un proyecto que comenzó hace 10 años, con la reforma de la antigua rectoral, del año 1772, y su entorno, un ambiente tranquilo y familiar.

Todo el complejo está rehabilitado respetando el diseño original de la piedra y las vigas de madera.