¿Cómo podemos saber si somos cristianos? Paul Washer

Paul David Washer nació en Estados Unidos, el 11 de septiembre de 1961 sus abuelos por parte de su padre fueron unos de los primeros misioneros bautistas en Brasil y en Mindanao, su padre lo crió trabajando muy duro aun siendo un niño pequeño, la madre de Washer fue católica pero por el testimonio de su madre bautistas y sus sufrimientos se convirtió al cristianismo bautista reformado a la edad de 12 años. En su adolescencia fue jugador de baloncesto y capitán de un equipo a la vez.

Está casado con Charo de nacionalidad Peruana, con quien tiene 4 hijos: Ian, Evan,Rowan y Bronwyn, actualmente viven en Radford, Virginia.

En cuanto a sus convicciones acerca de la familia, él cree y enseña que su esposa es su principal ministerio y después está su responsabilidad como padre y luego su rol como ministro de la Palabra de Dios. Además, su predicación se opone totalmente al actual concepto de noviazgo que no tiene como meta al matrimonio, llamado "noviazgo recreativo" o noviazgo por entretenimiento, ya que este no tiene nada que ver con los principios de pureza y matrimonio que enseña la Biblia.

Paul Washer estudio para ser abogado especializado en leyes petroleras en la Universidad de Texas tras terminar la carrera, inicio estudios en el Seminario Teológico Bautista Southwestern seminario perteneciente a la Convención Bautista del Sur y obtuvo una Maestría en Divinidad. Poco tiempo después de su graduación Paul salió de Estados Unidos y se mudó a Perú para servir como misionero.

Mientras estudiaba para ser abogado especializado en leyes petroleras en la Universidad de Texas se convirtió al cristianismo bautista reformado y experimentó el nuevo nacimiento.

Washer trabajó como misionero en Perú por 10 años. Durante ese tiempo fundo la “Sociedad Misionera Heartcry” para apoyar a sembradores de la Iglesia del Perú. El trabajo de HeartCry hoy en día apoya aproximadamente a 255 familias misioneras en 43 países del mundo, en Latinoamérica, África, Asia, Europa, Medio Oriente y Rusia.

Paul Washer frecuentemente predica en su iglesia local Radford Fellowship y es un reconocido escritor de libros de contenido espiritual tales como son El único Dios verdadero: Un estudio bíblico de la doctrina de Dios, La verdad acerca del hombre y El Poder y Mensaje del Evangelio, Llamado del Evangelio y Conversión Verdadera.

Los sermones de Washer se enfocan en el evangelismo, en la lectura, en cielo o infierno y meditación de La Palabra de Dios, en el evangelio y en la doctrina de la seguridad de la salvación. Casi siempre habla en contra de la práctica del llamado al altar, la oración del pecador y del foco en el crecimiento numérico de la iglesia. El formato evangelístico de Washer está fuertemente influenciado por los estudios y sermones de Charles Spurgeon.

Los sermones de Washer con frecuencia hablan acerca de la forma en que una persona es salvada del infierno, en sus temas afirma que las personas alcanzan la salvación por gracia por medio de la fe, conforme a la teología bíblica de la salvación. Washer concibe además la doctrina de la elección, es decir, que las personas que son salvadas no escogen arrepentirse y creer por sus propias capacidades sino que son escogidas por Dios antes de la fundación del mundo y es Dios quien da la gracia del arrepentimiento y la fe.

Sostiene la creencia bíblica de que la evidencia de la fe verdadera de una persona está en sus obras, sin embargo asegura que la gran mayoría de personas que hoy se consideran cristianos, en realidad no lo son, ya que estas viven vidas idólatras, pues no sirven al Dios de la Biblia, si no al dios que han creado los falsos maestros. Es uno de los pastores de la corriente contra el decisionismo.

Algo que caracteriza su tipo de sermón, es su rechazo hacia líderes religiosos que no predican el evangelio de Cristo, seguido menciona que estos presentan un mensaje antibíblico, con matices humanistas, enfatizando sobre todo el bienestar terrenal del hombre y no la gloria de Dios, este mensaje que promete prosperidad se compara con las esperanzas que daban los falsos profetas de Israel, los cuales profetizaban paz sin advertir al pueblo del inminente peligro. En relación a estas falsas enseñanzas, el pastor Paul Washer concluye que éstos convencen a los falsos convertidos a pensar que son cristianos, siendo lo peor de todo, que tales personas serán enviados al infierno si no se arrepienten de su maldad y se rinden al señorío de Jesucristo.