¿Qué es el leísmo, laísmo y loísmo? Explicación fácil y sencilla con ejemplos

Leísmo/Loislo/Laísmo



El leísmo es un fenómeno lingüístico que consiste en emplear las formas le o les del pronombre personal como objeto directo, en lugar de lo, la, los o las.

Ejemplo: Manuel le observó mientras se maquillaba.

En esa oración el pronombre le está sustituyendo a ella y cumpliría la función de complemento directo. Le no es un pronombre de complemento directo, el pronombre de complemento directo correcto ahí es la. Manuel la observó, lo que equivaldría a Manuel observó a ella.

La norma de la RAE permite que se use la forma leísta sólo con la tercera personal del singular masculino y cuando se trata de personas.

Si la frase fuera: Manuel le observó afeitándose, sería correcta. Aunque la forma no leísta sería: Manuel lo observó afeitándose.

Vemos que el pronombre le sustituye a un hombre, equivale a él.
Manuel observó a él afeitándose.

Serían incorrectas frases como: Les vi jugar a las muñecas (refiriéndose a niñas y en plural)
A María le sorprendieron copiando en el examen, (Sería a María la sorprendieron copiando en el examen).

El leísmo es un fenómeno muy común en el centro de España, pero también en diversos puntos de hispanoamérica.

Por otra parte el Loísmo, que es otro error lingüístico, y se da cuando los pronombres personales de complemento directo lo y los son usados con función de complemento indirecto, es decir en lugar de le/les.

Ejemplo: Tengo que sacarlos el ticket para el viaje, en vez de Tengo que sacarles el ticket para el viaje.

O Los dio una paliza. En lugar de les dio una paliza.

En la misma línea del loísmo estaría el laísmo, también incorrecto. El Laísmo es otro fenómeno lingüístico en el que se usan las formas la o las del pronombre personal como objeto indirecto, en lugar de le o les.

Ejemplos serían: La dolía una muela, en vez de le dolía una muela.

La entregó un regalo, por le entregó un regalo.

o, las dio besos, por les dio besos.

El laísmo es muy frecuente en el centro de España.

Para concluir tenemos que tener claro que estas incorrecciones se producen por el mal uso de los pronombres de complemento directo e indirecto, mezclando unos con otros sin seguir las normas de concordancias sintácticas.

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