Trajo a Casa a su EXNOVIA Embarazada Pensando que yo Cuidaría de TODOS pero no soy una IDIOTA

Me voy a divorciar. Mi esposo, el teniente Marcos, aún no lo sabe. Últimamente ha estado ocupado cuidando de su amor de la infancia, quien recientemente enviudó. Incluso la invitó a quedarse en nuestra casa, convirtiéndome en el hazmerreír de todas las mujeres del vecindario. En mi vida pasada, elegí soportarlo en silencio, dedicándome a cuidar de mi esposo y de su madre paralizada. Pero al final, Marcos y su madre estaban completamente entregados a Juliana, mirándome fríamente mientras moría. Cuando abrí los ojos de nuevo, tomé la firme decisión de renunciar a mi esposo. Voluntariamente solicité ir a construir el Noroeste, dedicándome por completo a mi país. Al mismo tiempo, presenté mi solicitud de divorcio. —¿Papeles de divorcio? ¿No acabas de casarte con Marcos Guerra? —mi supervisor frunció el ceño, sorprendido. Divorciarse después de poco más de un año era algo bastante raro en los años 80. No somos compatibles. De todas formas, terminaríamos divorciándonos tarde o temprano respondí. ¿Marcos está de acuerdo con el divorcio? preguntó.

Le mostré la última página, donde estaba la firma de Marcos. Por lo general, él era una persona muy firme y estable. No esperaba que aceptara. Pero cuando le entregué los papeles, un guardia llamó de repente a la puerta. Teniente, la señorita Juliana Estrella ha llegado y está esperando afuera. Al escuchar el nombre de Juliana, Marcos firmó los papeles sin siquiera mirarlos. Mi supervisor verificó que era su firma. Finalmente, solo suspiró y dijo: Está bien. Si ambos están de acuerdo, no hay nada más que decir. Sin embargo, según las regulaciones, dado que se están divorciando tan rápido, es posible que envíen a un mediador para intentar reconciliarlos. Al ver que había cedido, le entregué mi solicitud para el Proyecto de Desarrollo del Noroeste. Me miró sorprendido, pero al final, solo volvió a suspirar. Si estás segura de esto, está bien. La madre de Marcos también es bastante difícil. Irte al Noroeste podría ser bueno para ti. Incluso los de afuera sabían que mi suegra era complicada. Sonreí y le dije: